Aprender exhibiendo: mostrar la escuela
Este enfoque propone la planificación e implementación de muestras de museo. El proceso implica a la investigación, la escritura, el diseño, la resolución de problemas, la comunicación y el trabajo en equipo. No son ferias de ciencias en las que los estudiantes muestran a otros qué aprendieron, sino que son exhibiciones similares a las de los museos profesionales, están basadas en un guion y en éstas se cuenta una historia (D’Aquisto, 2006, 2013).
Las muestras están basadas en conceptos, temas curriculares, temas candentes, eventos o combinaciones. El proyecto permite desarrollar capacidades de comunicación con diferentes audiencias. Adicionalmente, da la posibilidad de abrir las instituciones a la comunidad y que el conocimiento trascienda las paredes de aulas y escuelas.
¿Cómo funciona?
La elaboración de la muestra obliga necesariamente a realizar producciones escolares que van más allá de las típicas producciones de lápiz y papel. Se propone realizar demostraciones, exhibir colecciones, ofrecer materiales interactivos, presentar testimonios en audio y video. También se destaca que estudiantes, docentes o familiares se desempeñen como actores ambulantes representando papeles de personalidades claves en relación con el tema. Por ejemplo: un papá que actúa de Diego Rivera junto a una maestra que actúa de Frida Kahlo el día de apertura de la muestra, recorre el lugar y responde preguntas de los visitantes desde la perspectiva del personaje.
Las etapas del proceso del museo escolar van desde la planificación, hasta la apertura son las siguientes:
1. Presentar el proyecto del museo; 2. Visitar un museo profesional; 3. Investigar el tema del museo; 4. Diseñar lo que se va a exhibir; 5. Escribir para el público del museo; 8. Construir lo que se va a exhibir; 7. Aprender el contenido de la muestra completa; 9. Abrir el museo al público.
Existen diferentes fuentes en las cuales se pueden consultar experiencias en escuelas, por ejemplo, en el canal de Kids Curators en Vimeo. Por otra parte, se pueden utilizar rúbricas para evaluar el proceso de investigación, el diseño de la exhibición, la calidad de las etiquetas, el trabajo en equipo, entre otros. Por lo tanto, quienes implementen esta propuesta podrán realizar una evaluación exhaustiva.