Como contexto de las negociaciones paritarias docentes, un estudio del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) demostró que persiste en el país una fuerte desigualdad en los salarios docentes, que llega a que algunas provincias paguen más del doble que otras.
Esa es la principal conclusión a la que arriba un documento elaborado por el Cippec, que toma como referencia el salario bruto de un docente de jornada simple de nivel primario con 10 años de antigüedad en los valores de 2017.
La brecha entre la provincia que paga mayores salarios a sus docentes (Santa Cruz, seguida por Tierra del Fuego, Córdoba y Chubut) y la que paga menores sueldos (Santiago del Estero, seguida por Formosa, Misiones y Catamarca) es de 2,2 veces.
“Las disparidades se deben a la coparticipación federal y a las falencias estructurales para lograr que el desarrollo económico alcance a todo el país”, señaló Axel Rivas, investigador del CIPPEC y coautor del documento.
El decano de la Escuela de Educación de la Universidad Austral, Julio Durand, reveló que una de las características salientes del sistema educativo argentino es la disparidad entre las provincias. Uno de los principales problemas que destaca Rivas es que el Fondo de Compensación Salarial (FCS,) que busca solventar las desigualdades entre las provincias, se fue reduciendo en proporción con el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), que forma parte de una liquidación que se distribuye por igual a todos los docentes. Asimismo, Durand precisó que la decisión de no llamar a una paritaria nacional tiene algunos efectos colaterales: la falta de discusión sobre la condiciones laborales, la carrera docente y la inequidad entre jurisdicciones.
Tanto Rivas como Durand coincidieron en que esta falta de discusión es responsabilidad del Gobierno y de los sindicatos docente, quienes circunscriben el conflicto a las paritarias. Una posible solución para Rivas sería el desarrollo de una fórmula objetiva, basada en una variable que indique cuántos recursos fiscales tienen las provincias por habitante.
Se beneficiaría así a las provincias más perjudicadas, entre ellas, la provincia de Buenos Aires, que contiene casi el 40% de docentes a nivel nacional y es también la que tiene menos recursos fiscales por habitante.