En la actualidad existen 43 proyectos con estado parlamentario relacionados a licencias: 28 en Diputados y 15 en el Senado, según relevó Unicef junto al Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) y Cippec.
Desde las tres organizaciones proponen dejar de mirar la licencia como un mero “período de descanso” a la hora de tener un hijo, reducir el “sesgo maternalista” y abordar la temática como “una de las políticas que va a transformar radicalmente la sociedad” basada en cuatro principios: la universalidad, es decir, que sea un derecho que vaya más allá de la condición de empleado; la coparentalidad, brindarle más días de licencia al padre; la equidad, equiparar los días otorgados por nacimiento a los otorgados por adopción y contemplar a las familias del mismo sexo, y la gradualidad, pensar en esquemas que sean sustentables en términos financieros.
“Proponemos que la licencia por maternidad aumente a 98 días, en base a la recomendación de la Organización Mundial del Trabajo (OIT), y que la licencia de paternidad se extienda a 30 días y, en paralelo, incluir una nueva figura, la de licencia familiar: que cualquiera de los dos padres se las pueda tomar por mutuo acuerdo, con incentivo para que el padre participe del cuidado”, explica José Florito, analista del programa de Protección Social de Cippec.