Capital natural y desarrollo productivo sostenible

Publicado el 11 de septiembre de 2024

Uno de los grandes desafíos globales para las próximas décadas es asegurar una provisión sostenida de alimentos, bienes y servicios agropecuarios para satisfacer las demandas globales con el menor impacto ambiental posible. La creciente degradación de los ecosistemas pone en riesgo a nivel global la biodiversidad y la seguridad alimentaria, y ante esto, crece la demanda por productos agropecuarios que cumplan criterios de sostenibilidad ambiental.  

Esta situación presenta a Argentina una oportunidad única para posicionarse como un actor relevante en la escena internacional. Con su vasto capital natural, su capacidad y tecnología agrícola, el país tiene el potencial de liderar en prácticas sostenibles que no solo atiendan estas necesidades urgentes, sino que también impulsen su desarrollo económico y su proyección global. 

En ese contexto, el Gran Chaco (integrada por varias provincias argentinas) es una región estratégica: la ecorregión boscosa más extensa del país -el 60% de bosques nativos- y segunda de América Latina, ocupa el 25% del territorio y el 20% de la población del país. Ha sido objeto de tensiones territoriales por el avance de la frontera agropecuaria -se expandió 3 veces más que el promedio del país-, y ha mostrado las mayores tasas de pérdida de bosque nativo. Pero, al mismo tiempo, es un territorio que necesita encontrar soluciones para acelerar su desarrollo, mejorando los indicadores socioeconómicos -de los más bajos del país-, y encontrando alternativas productivas que generen fuentes de ingresos y bienestar para su población, compatibilizando una mayor productividad con el cuidado del capital natural. 

Desde 2007, Argentina cuenta con una política forestal que ha sido fundamental para reducir la tasa de deforestación, aunque persisten importantes desafíos en su adecuada implementación. La Ley 26.331 de Presupuestos Mínimos para la Protección y el Uso Sustentable de los Bosques Nativos (Ley de Bosques) establece el Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos (OTBN) y el Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos (FNECBN). Desde su implementación, también se mejoraron progresivamente los mecanismos para el monitoreo de la situación de los bosques a partir del OTBN y mandatos más ordenados de control y fiscalización, entre otros. No obstante, tras más de 15 años de vigencia, persisten importantes desafíos para su cumplimiento adecuado y para la integración de la actividad productiva con la conservación del medio ambiente en la región del Gran Chaco.  

CIPPEC junto al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) elaboró un estudio “La deforestación en el Gran Chaco argentino: avances y desafíos”  que evalúa la pérdida de bosques y el desempeño de la ley 26.331 en el Gran Chaco, con el objetivo de encontrar las oportunidades de mejora y de desarrollo para la región. El estudio destaca 6 recomendaciones: 

🌳 Fortalecer la Ley de Bosques, mayor efectividad del OTBN y los mecanismos de control 

🔬Impulsar la reconversión de tierras degradadas en áreas productivas y promover un fuerte proceso de investigación y desarrollo (I+D) 

♻️ Fomentar prácticas sostenibles y un sistema de trazabilidad de las cadenas productivas de la región para el desarrollo de mercados 

🔥 Fortalecer la política de prevención y control de incendios en la región y la penalización de las prácticas de uso de fuego 

⚖️ Promover un debate legislativo para establecer un marco penal para la deforestación ilegal 

💡 Crear sistemas innovadores de financiamiento al desarrollo productivo sostenible y la conservación 

Articular una visión común sobre el desarrollo de la región debe convocar a todos los actores. El 13 de agosto CIPPEC y BID presentaron el estudio en un evento que convocó a especialistas, funcionarios nacionales y provinciales y productores, y contó con la presencia de 7 gobernadores de provincias del norte argentino (Misiones, Corrientes, Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Jujuy y Catamarca) y más de 300 participantes. Los diálogos hicieron hincapié en las oportunidades que esta agenda representa para la región y el país, pero esencialmente en los desafíos de articular una visión común sobre el desarrollo de la región.  Se destacó: la necesidad de fortalecer los procesos de participación en los OTBN y de cumplimiento de las directrices de la Ley de Bosque en su actualización; de la necesidad de implementar un sistema efectivo de monitoreo de desmostes y de impulsar incentivos económicos y fiscales para fomentar la conservación y un sistema productivo sostenible; el desarrollo de tecnologías e innovación financiera para compatibilizar la producción agropecuaria con la conservación de los bosques nativos; implementar sistemas de trazabilidad que permitan anticipar a las regulaciones de mercados internacionales.  

Es alentador el interés por esta agenda, en un contexto de crecientes restricciones comerciales para la Argentina relacionadas a los bosques y el cambio climático, junto a una demanda creciente de alimentos para la cual Argentina puede jugar un rol crucial. 

Para conocer más sobre el diagnóstico y recomendaciones pueden ingresar al siguiente link 

 

 

Autores


Diego Moreno

Investigador asociado de Ciudades y Desarrollo Económico

Paula Szenkman

Directora de Desarrollo Económico

Agustín Chiarella

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