Las licencias maternales, paternales y familiares son un derecho de los trabajadores/as y deben garantizar el derecho de todos los niños/as de estar acompañados por su madre y padre en distintos momentos de su vida. Existe una amplia heterogeneidad en los tres tipos de licencias y solo el 50,4% de las trabajadoras y el 49% de los trabajadores están cubiertos.
Los niños/as reciben, desde su primera infancia, un trato discriminatorio según la inserción de sus padres en el mercado laboral. Es crucial una nueva ley nacional de licencias que contribuya al desarrollo infantil, facilite la inserción de las mujeres en el mercado laboral y favorezca la construcción de una más justa división de roles intrahogar.