El jefe de Gabinete, Marcos Peña, ya presentó 16 informes orales al Congreso y recibió 1.526 preguntas en las sesiones informativas. Pero sólo el 3% de las preguntas refirieron al monitoreo del presupuesto nacional o de la inversión presupuestada.
El informe de gestión mensual que debe realizar el jefe de Gabinete en el Congreso es una oportunidad de aumentar la calidad del debate sobre la marcha del gobierno. Con una agenda abierta de temas para preguntas de los legisladores, el actual jefe de Gabinete, Marcos Peña, ya presentó 16 informes orales al Congreso (sin contar el de este miércoles, 3 de octubre) desde el inicio de su gestión y recibió 1.526 preguntas durante las sesiones informativas. Sin embargo, sólo el 3% de las preguntas monitorearon el presupuesto nacional o la inversión pública presupuestada en distintos sectores.
Cantidad de preguntas acerca del presupuesto sobre total de preguntas a Peña
Dentro de las 55 preguntas destinadas a cuestiones presupuestarias, el 65% se refirió a un área de inversión concreta, resaltando las consultas sobre el presupuesto e inversión en infraestructura mientras que el otro 35% de las preguntas se concentró en temas generales del presupuesto. El gráfico 2 muestra esta distribución.
Foco de las preguntas sobre presupuesto e inversión (2015-2018)
De este 3% , los legisladores de las provincias de Buenos Aires, Neuquén y Formosa fueron los que más preguntaron sobre cuestiones vinculadas al presupuesto. En el caso de los diputados y senadores de la provincia de Buenos Aires, las preguntas giraron en torno a cuestiones vinculadas al presupuesto destinado a la inversión en educación y cultura.
Preguntas sobre presupuesto por provincia
El presupuesto es una institución central en la gestión de gobierno. No solo es un instrumento técnico para la asignación del gasto sino que fija las prioridades de política pública para el año siguiente. Es medular al plan de gobierno en la medida que orienta la inversión y asigna los recursos.
Todavía hay espacio para que los informes de gestión sean una instancia de monitoreo del plan de gobierno a través de un seguimiento más profundo del presupuesto y su evolución. Contar con una configuración explícita de políticas de desarrollo y resultados medibles que den cuenta de sus avances facilitaría el seguimiento de los objetivos de gobierno por parte de los legisladores y la rendición de cuentas de parte del ejecutivo.