Hoy se sancionó de manera definitiva la implementación de la BUP en el sistema electoral. Con este nuevo instrumento de votación, avanzamos hacia elecciones más transparentes y equitativas.
Publicado el 1 de octubre de 2024
La Cámara de Diputados aprobó hoy la adopción de la Boleta Única de Papel (BUP) como instrumento de votación a nivel nacional. La sanción de esta ley es el resultado de un proceso participativo en el que un grupo de organizaciones de la sociedad civil tuvo un rol clave. En 2009, CIPPEC, junto a otras OSCs, empezamos a promover la adopción de la BUP como un instrumento de votación más eficaz, equitativo y transparente. En 2022, participamos del debate que derivó en la media sanción de la Cámara de Diputados y trabajamos para lograr la aprobación en el Senado. Ahora, consideramos fundamental avanzar hacia una reglamentación que garantice su efectividad y transparencia.
Principales beneficios de la BUP:
- La distribución y disponibilidad de la BUP en los centros de votación es responsabilidad del Estado. Esto garantiza el acceso a una oferta electoral completa en todo el territorio mientras se desarrolla la jornada electoral.
- Asegura equidad. Cada boleta contiene la oferta electoral completa y es diseñada por la autoridad electoral, que aplica los mismos criterios de diseño y presentación para todas las listas por igual.
- Brinda una mejor experiencia al electorado. En Santa Fe (2015), el 94,5% de los y las votantes aseguró que el uso de boleta única papel le resultó más fácil que hacerlo con boleta partidaria y el 92,3% calificó el sistema como “muy bueno o bueno”.
En Argentina, la boleta partidaria de papel es el instrumento de votación en las elecciones nacionales y en la gran mayoría de las provinciales. Cada agrupación política o lista está representada en una boleta de categorías diferentes. Los partidos son los responsables de diseñar, imprimir –con aprobación judicial previa–, distribuir y custodiar las boletas el día de la elección. Esto genera desventajas para algunos partidos con dificultades para custodiar y asegurar la disponibilidad de boletas en todas las mesas. Además, la boleta partidaria puede resultar compleja para quienes emiten un voto cruzado (apoyar diferentes partidos para distintos cargos en juego).
En la mayoría de las democracias del mundo se utiliza la boleta única de papel (BUP) en la que se presentan las listas y/o candidaturas de los diferentes partidos: su distribución y disponibilidad en los centros de votación es responsabilidad del Estado. La BUP equipara las condiciones de competencia entre partidos y mejora el acceso al sufragio entre los y las votantes. A diferencia de la boleta partidaria, la boleta única permite que quienes votan tengan todas las opciones en un único papel y puedan elegir la que prefieren marcándola. Esto evita la complejidad y los errores potenciales que surgen con el corte de boleta partidaria.
En Argentina, Córdoba, Santa Fe y Mendoza implementan esta forma de votar, con una evaluación positiva de los y las electores/as: en Santa Fe (2015), el 94,51% aseguró que votar con boleta única papel le resultó más fácil que hacerlo con boleta partidaria.
“En nuestro país, las elecciones funcionan, son limpias y justas. Y, sin embargo, como todo proceso, las elecciones son perfectibles. Como integrantes del colectivo ‘Boleta Única es Mejor’, desde CIPPEC celebramos la sanción de la ley. Ahora resultará central que se avance en una reglamentación sólida y participativa que garantice las mejores condiciones posibles para su primera implementación a nivel nacional”, afirmó Gala Díaz Langou, directora ejecutiva de CIPPEC.