Pequeños científicos: grandes ideas
“Pequeños científicos” es una experiencia educativa que articula esfuerzos de múltiples actores con el objetivo principal de estimular y contribuir a la renovación de la enseñanza-aprendizaje de las ciencias naturales en las escuelas. Busca desarrollar una educación STEM (Ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) de calidad y promover en los niños, niñas y jóvenes el desarrollo de un espíritu científico e investigador. Se propone desarrollar habilidades de experimentación, de expresión y comunicación, así como valores ciudadanos mediados por la confrontación de ideas.
Entre sus beneficios se destaca que los niños puedan formular las hipótesis, experimentar para comprobarlas y compartir la experiencia, lo que permite que el aprendizaje sea significativo. Su implementación aporta también a desarrollar la autonomía de los estudiantes, mejorar su expresión oral y escrita y desarrollar su pensamiento lógico. Además, se modifica el rol del profesor, que pasa a ser un motivador e indagador, y que se generan grupos de trabajos de maestros al interior de las instituciones.
El valor de la propuesta reside en dos grandes ejes: el primero es una metodología para enseñar ciencias que promueve estudiantes indagadores, colaboradores y alfabetizados científicamente; el segundo, las alianzas entre escuelas y universidades.
¿Cómo funciona?
El programa se implementa inicia con la formación de docentes y de formadores en dos escalas de tiempo: una orientada a desarrollar en los docentes competencias mínimas en las nuevas prácticas -tanto metodológicas como disciplinares- y otra destinada al aprendizaje institucional.
Un punto importante es la adaptación del proceso de enseñanza y aprendizaje de las ciencias a la metodología de la “indagación guiada”. Para ello, el docente debe guiar este proceso con miras a que los estudiantes logren avances en la comprensión de los aspectos fundamentales del mundo, permitiéndoles recorrer una parte del camino que ha recorrido el mundo científico.
Las clases se organizan con una secuencia explícita. La primera etapa es la focalización del tema, que tiene como objetivo despertar el interés de los estudiantes y registrar sus preconceptos sobre una temática o problema. La segunda etapa es la exploración o indagación directa, a partir de la cual se sacarán conclusiones sobre la base de datos reales. En la etapa de extensión, se trabaja para comprender los datos obtenidos, emprender investigaciones más profundas y proponer soluciones. Lo que sigue es la reflexión y análisis, para organizar los datos y resultados encontrados, y contrastarlos con las hipótesis formuladas, las predicciones basadas en los conocimientos dados por la ciencia y los resultados de la experimentación. Finalmente, en la etapa de aplicación, se busca trasladar lo aprendido a situaciones y a problemas nuevos de la vida diaria.
Esta estrategia promueve el trabajo colaborativo, la discusión y la confrontación de ideas basándose en la argumentación y en evidencias. Se promulga, también, llevar a cabo un sistema de evaluación formativa que brinde constante retroalimentación al aprendizaje de los niños y niñas. En caso de ser posible, se establece una alianza entre el colegio, una universidad y un colegio modelo cercano. La universidad sirve de relevo en la iniciativa, mientras el colegio sirve de referencia.
Referencias
“Pequeños Científicos” nace en Colombia en 1998, bajo un proyecto de la Universidad de los Andes. Comenzó en el Liceo Francés de Bogotá Louis Pasteur y luego se extendió a todo Colombia basándose en las evidencias que mostraron cómo los estudiantes adquieren competencias, como observar, descubrir y describir el entorno en el que viven con sus objetos, sus seres y sus cosas; reunir información, seleccionar, organizar y utilizarla correctamente; analizar los resultados hallados, extraer conceptos básicos, plantear interrogantes y formular hipótesis; compartir los resultados, las ideas, los hallazgos, la nueva visión del mundo y socializar los nuevos conocimientos; aplicar lo aprendido a la solución de problemas que se le presenten y tomar decisiones frente a nuevas situaciones de la vida.