Se detecta una agenda legislativa más acotada en tamaño, menor cantidad de sesiones, y una disminución relativa del éxito legislativo.
La cantidad de sesiones ha declinado, en general, desde 2007: el promedio de sesiones propuestas por la CLP para el período 2008-2017 se redujo a un tercio, en relación con 1999-2007.
Por otra parte, las sesiones especiales prácticamente sustituyeron a las de tablas: el promedio de 2008-2017 duplica al período 1999-2007.