Publicado en junio de 2022

Las elecciones en Argentina son limpias, justas y transparentes. Sin embargo, la boleta partidaria, el instrumento a través del cual la ciudadanía traduce sus preferencias en votos actualmente utilizado a nivel nacional y en la mayoría de las provincias, genera desigualdades entre votantes y entre partidos.

En mayo de 2022, el debate por la boleta única en papel para las elecciones nacionales entró al Congreso. Carolina Tchintian, Manuel Bertazzo y Álvaro Fernández Castex -directora, coordinador y analista del programa de Instituciones Políticas de CIPPEC- nos cuentan qué es, cómo funciona y qué ventajas tiene la boleta única para la democracia argentina.

*música de introducción*

LOCUCIÓN: Hola, soy Belén Felix y esta es una nueva edición del podcast de CIPPEC, un podcast en el que hablamos de los temas que tenemos que pensar para construir una Argentina con equidad y crecimiento. 

*insert NOTICIERO* 10:30 – 10:52

LOCUCIÓN: 

Llevamos casi 40 años de Democracia ininterrumpidos y más de 100 desde la sanción del voto universal (para los varones mayores de 18 años), secreto y obligatorio. En todo ese tiempo Argentina cambió en muchos aspectos: el voto se amplió a toda la población mayor de 16 años, mejoramos el acceso de las mujeres a los cargos electivos y la vuelta de la democracia permitió la ampliación de derechos de todo tipo.   

Hoy no tenemos dudas de que, desde ese momento, hace ya casi cuatro décadas, las elecciones en Argentina son limpias, justas y transparentes. Pero esto no significa que no podamos seguir pensando la manera en la que ejercemos la democracia en nuestro país. 

Una de las formas en que podemos mejorar la democracia argentina es repensando los instrumentos de votación. Los instrumentos de votación, que usualmente llamamos boletas, representan el vínculo que tenemos las y los ciudadanos con las responsabilidades de las candidatas, candidatos y partidos políticos. En nuestro país conviven actualmente diferentes tipos de instrumentos y todos influyen sobre la forma en la que votamos. 

AUDIO 1

El debate actual es sobre un instrumento, pero no es instrumental. Es un debate sustantivo sobre la representación y el acceso al voto.  

LOCUCIÓN:

Como nos enseñan en la escuela, antes de la Ley Saenz Peña, el voto no era secreto y no existían las boletas, se votaba expresando las preferencias en voz alta. Pero, a partir de 1916, en nuestro país hubo acuerdo en que el carácter secreto del voto era (y sigue siendo) muy importante para que podamos elegir libremente entre candidatos y candidatas.  

A partir de entonces, se impuso el sistema de boleta partidaria muy similar al actual, en el que únicamente aparecía el nombre del partido o alianza electoral y los nombres de los candidatos. Las boletas cambiaron desde entonces, sobre todo en su diseño, como por ejemplo con la incorporación de colores o fotos a partir de 2009. Sin embargo, a grandes rasgos, el instrumento de votación siempre fue el mismo.  

Este es el instrumento de votación en las elecciones nacionales y en casi todas las provinciales. Durante los últimos años, algunas provincias han establecido otros instrumentos de votación, con similitudes y diferencias. 

En Santa Fe, por ejemplo, usan la boleta única por categoría; en Córdoba, todas las categorías están en una misma boleta; las ciudades de San Luis y Bariloche también adoptaron la boleta única. También en otras provincias se adoptó su formato electrónico como en Salta, Neuquén y algunos municipios de Córdoba: La Falda, Cosquín y Marcos Juárez. En la Ciudad de Buenos Aires que solo se usó en 2015.  

Como vemos, no hay una sola forma de votar, incluso en nuestro país, la historia y la geografía nos dicen que hay variadas formas. Por eso, es bueno abrir el debate para decidir en conjunto cuál es la mejor forma de emitir el voto. 

AUDIO 2 00:00 – 00:20 

La boleta única de papel o BUP es un instrumento de votación que presenta toda la oferta electoral en una sola boleta. Sus diseños son de los más diversos, pero su característica fundamental es que el Estado asume la provisión del instrumento de votación oficial en cada centro de votación, garantizando la disponibilidad de las boletas durante toda la jornada electoral.

LOCUCIÓN: El que habla es Álvaro Fernández Castex, licenciado en Ciencia Política de la Universidad de Buenos Aires y analista del programa de Instituciones Políticas de CIPPEC. 

AUDIO 2 00:20 – 01:20 

En Argentina, Córdoba y Santa Fe la utilizan para sus elecciones provinciales desde 2011, aunque con diferencias en su formato y diseño.   

Por un lado, el modelo cordobés contiene todas las categorías en juego en la misma boleta en la cual las agrupaciones aparecen en las columnas y las categorías a elegir en las filas horizontales. Además, la primera columna de la boleta tiene un casillero para que la y el elector pueda efectuar un voto de lista completa, pudiendo elegir así al mismo partido o agrupación política para todas las categorías en juego.   

Por su parte, la boleta única santafesina es un modelo dividido por categorías a elegir. La y el votante recibe de la autoridad de mesa una boleta diferente por cada categoría de cargos a elegir -una para gobernador y vice, otra para diputados/as, otra para senadores/as, etc. Además, se utilizan colores para diferenciar las boletas para cada cargo. 

LOCUCIÓN: ¿Cuáles son sus ventajas? ¿Por qué cambiar? 

Seguramente estás escuchando este episodio para entender exactamente esto.  Manuel Bertazzo, licenciado en Estudios Internacionales de la Universidad Torcuato Di Tella y Coordinador del programa de Instituciones Políticas de CIPPEC, explica las tres ventajas que tiene la boleta única en papel. 

AUDIO 3 

Cuando el Estado centraliza la tarea de proveer el instrumento de votación, esto:   

1. En primer lugar, equipara las condiciones de competencia para los partidos políticos porque se aliviana el esfuerzo que las agrupaciones deben hacer para custodiar las boletas y garantizar su disponibilidad en todos los centros de votación durante toda la jornada electoral. 
2. En segundo lugar, garantiza la igualdad de los derechos políticos de las y los votantes porque asegura el acceso a la oferta electoral completa a lo largo del territorio y durante todo el día de votación.  
3. Y por último, garantiza que la experiencia de votar para las y los electores sea uniforme y consistente a través de los distritos. Además, mejora esa experiencia porque se traduce de manera más fácil y fiel una preferencia en un voto. 

LOCUCIÓN: El foco de la discusión está en la experiencia de quien vota, en el acceso a la oferta electoral y en la responsabilidad del Estado en proveer y garantizar la equidad en las condiciones de competencia. 

La presencia efectiva de todas las candidaturas en cada centro de votación durante toda la jornada es un hecho que impacta en la posibilidad de la ciudadanía de elegir la opción de su preferencia. 

Repensar los instrumentos de votación no cuestiona la integridad o confiabilidad del proceso electoral, sino que plantea un debate sobre equidad en la competencia, acceso al sufragio y experiencia de votar. 

Uno de los argumentos en contra de su adopción que escuchamos mucho durante el debate en comisiones en el 2022 es que la boleta única incrementa el “voto cruzado” y que esto tiene consecuencias sobre la gobernabilidad. 

Entonces: ¿La boleta única papel genera un aumento en el voto cruzado?

AUDIO 4 

El voto cruzado es cuando un elector o electora elige votar a diferentes partidos para distintas categorías en juego. Es decir, por ejemplo, elige al partido A para presidente y al partido B para diputados.  

Este tipo de votos está permitido en nuestro país, pero con la boleta partidaria el voto cruzado supone una dificultad desde el punto de vista mecánico y el riesgo de cometer un error y desperdiciar el voto.  

La BUP facilita la emisión de ese tipo de voto cruzado. Cuando decimos que es un mejor instrumento, lo hacemos precisamente porque permite al votante traducir con mayor facilidad su preferencia en un voto. Si esa preferencia es por un partido para un cargo y otro partido para un segundo cargo, será más fácil para el votante emitir ese voto.  

Así, el potencial aumento del corte de boleta sería indicador de la superioridad del instrumento para traducir preferencias en votos y de la facilidad de su uso. 

LOCUCIÓN: La Boleta Única en Papel, mejora la experiencia de votar y además le saca a los partidos la responsabilidad de hacer sus propias boletas. ¿Qué rol jugarían los partidos entonces? 

Carolina Tchintian, Doctora en Ciencia Política de la Universidad de Rice y directora del programa de Instituciones Políticas de CIPPEC explica que el rol central que juegan tanto los partidos como la ciudadanía en general es independiente del instrumento de votación. 

AUDIO 5

El hecho de que el Estado adquiera la responsabilidad del diseño, impresión y distribución de las boletas en todo el país nivela la cancha: de esta forma, los partidos no deben depender de su cobertura territorial para garantizar la disponibilidad y custodiar del instrumento de votación.  

Sin embargo, los partidos políticos no se debilitan con la adopción de la boleta única papel. En nuestro país, no se admiten candidaturas independientes. Las listas que integran la boleta única papel son aquellas definidas por los partidos políticos. Son listas cerradas y bloqueadas, no hay posibilidad de que las y los candidatos compitan por fuera de una estructura partidaria.   

Los partidos políticos mantienen su rol central en las elecciones y también en la fiscalización durante la jornada electoral.   

LOCUCIÓN: Como ya dijimos, a pesar que las elecciones nacionales se realizan hace por lo menos 40 años con boleta partidaria, hay otras experiencias provinciales en nuestro país. Los datos que tenemos, a partir de un estudio de CIPPEC de 2015 sobre la usabilidad y confianza de la boleta única en Santa Fe nos indican que la experiencia fue positiva.  

Seis de cada 10 votantes (61%) aseguró que votar con boleta única papel le resultó más fácil que hacerlo con boleta partidaria.  

AUDIO 6 

Todo cambio requerirá un período de aprendizaje para la ciudadanía, partidos y autoridades. La experiencia de Santa Fe y Córdoba muestra que esto puede lograrse. 

LOCUCIÓN: RECAPITULEMOS: ¿Por qué pensaríamos en cambiar el instrumento de votación? 

En el sistema actual, cada partido o lista está representada en una boleta de categorías diferentes adheridas entre sí. Los partidos son los responsables de diseñar, imprimir, distribuir y custodiar las boletas el día de la elección. Esto puede presentar inconvenientes a la hora de garantizar la oferta electoral en todo el territorio. 

Además, la boleta única partidaria viene con las categorías pegadas, incluso con elecciones de distintos distritos (como presidente y gobernador en la misma boleta). Esta forma de presentar las candidaturas nos presenta un obstáculo a la hora de poder elegir libremente para cada categoría. Primero, cortar la boleta implica un esfuerzo deliberado que el sistema no facilita y además corremos el riesgo de que si no está bien cortada por donde corresponde, nuestro voto sea anulado. 

Entonces, discutir el instrumento de votación es una búsqueda y garantizar una buena experiencia en el ejercicio del voto. 

Seguramente te estés preguntando ahora: ¿qué pasa si el año que viene tenemos que votar con boleta única? 

*despertador*

Te vas a levantar como cualquier domingo de elección. Si te gusta ir a la mañana, desayunás y salís para la escuela, si sos más de la tarde, vas al almuerzo familiar y después vas a la escuela.  *timbre escolar*

En la puerta de la escuela mirás el padrón y buscás tu mesa. *ruido de personas conversando*

Hasta ahí todo igual. Cuando llegue tu turno, las autoridades de mesa te van a dar la boleta única papel y un bolígrafo para que elijas tus preferencias en cada categoría. 

*silencio*

Entrás al cuarto oscuro para marcar las opciones electorales de tu preferencia y cuando termines, vas a doblar la boleta para que no se vea tu voto  y metés el voto en la urna. 

AUDIO 7 00:01 – 00:48

La boleta única en papel tiene muchas ventajas, pero la más relevante se relaciona con la manera en la que equipara derechos políticos de elegir y ser elegidos a través del territorio.

La revisión del instrumento de votación es una discusión compleja que requiere un profundo análisis sobre su impacto en el ejercicio de la democracia. 

Es clave llevar a cabo este debate sobre la base de evidencia, abierto a la sociedad y con la participación de todas las partes involucradas, para asegurar que cualquier cambio sea dotado de la legitimidad que surge del consenso de las mayorías.  

*cortina baja* 

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